La sensibilidad dental es un problema común que afecta a muchas personas, al punto de ser una de las principales razones por las que los pacientes deciden acudir al dentista. Este malestar, aunque no siempre es un signo de un problema grave, puede afectar la calidad de vida. Por ello, en este artículo creado desde el Consultorio Odontológico Dr. Manuel Riesgo, exploraremos las principales causas de la sensibilidad dental y cómo se puede tratar para aliviar el dolor y prevenir inconvenientes en el futuro.
¿Qué es la sensibilidad dental?
La sensibilidad dental ocurre cuando la dentina, la capa interna del diente, queda expuesta y se vuelve vulnerable a estímulos externos. Al estar conectada con los nervios del diente, la dentina provoca un dolor agudo cuando se ve afectada por cambios bruscos de temperatura, ciertos alimentos, bebidas o incluso al cepillarse.
¿Cuáles son las causas de la sensibilidad dental?
La sensibilidad dental es una molestia común que puede ser causada por diversos factores, como el desgaste del esmalte o la recesión de las encías. A continuación, te explicamos las principales causas de su origen:
- Desgaste del esmalte dental
El esmalte es la capa externa y protectora del diente. Cuando se ve desgastad o con daños, la dentina queda expuesta y esto hace que los dientes se vuelvan sensibles. Por lo general, el desgaste del esmalte se deriva de factores como un cepillado demasiado agresivo, exposición a ácidos provenientes ciertos alimentos y bebidas y también por el consumo de productos procesados.
- Recesión gingival
La recesión gingival se refiere a cuando las encías se retraen de los dientes, provocando que las raíces de las piezas queden expuestas. Estas raíces no están protegidas por el esmalte, sino por una capa sensible conocida como “cemento radicular”. Su origen suele estar relacionado con una higiene bucal inadecuada, un cepillado demasiado fuerte o enfermedades dentales.
- Caries no tratadas
La caries, una de las enfermedades dentales más comunes, también puede estar detrás de la sensibilidad dental. Esta afección es capaz de afectar tanto al esmalte como a la dentina del diente, por lo que puede terminar por exponerla y provocar así dolor y sensibilidad. En casos más graves, la caries puede llegar al nervio, lo que puede generar dolor intenso e incluso una infección.
- Consumo de ácidos
La ingesta frecuente de alimentos y bebidas ácidas puede desgastar el esmalte dental, aumentando considerablemente el riesgo de sufrir sensibilidad. Comidas como frutas cítricas, refrescos, vinagre e incluso ciertos aderezos pueden contribuir a la erosión del esmalte del diente y provocar que la dentina quede expuesta a los estímulos.
- Bruxismo
El bruxismo es el acto de rechinar o apretar los dientes, especialmente durante la noche. Este hábito puede desgastar el esmalte dental de manera significativa y exponer la dentina, lo que aumenta el riesgo de sensibilidad dental. Además, el bruxismo puede afectar las encías y provocar microfisuras en los dientes, lo que también puede contribuir a la sensibilidad.
- Tratamientos dentales recientes
Algunos procedimientos de atención dental pueden causar sensibilidad temporal. El uso de productos químicos durante un blanqueamiento dental, por ejemplo, puede afectar la dentina y provocar sensibilidad durante varios días. Sin embargo, algunos pacientes pueden experimentar una sensibilidad más prolongada después de ciertos tratamientos dentales, especialmente si sus dientes son más susceptibles.
- Genética
La genética también juega un papel importante en lo que respecta a la sensibilidad dental. Ciertos estudios aseguran que algunas personas nacen con dientes más susceptibles a la sensibilidad debido a la composición genética de su esmalte o la estructura de su dentina. Además, a medida que envejecemos, el esmalte dental tiende a desgastarse de forma natural, lo que hace que la dentina esté más expuesta y, por lo tanto, se incrementa la posibilidad de experimentar sensibilidad.
¿Cuáles son los tratamientos para combatir la sensibilidad dental?
Afortunadamente, existen varias opciones para tratar y aliviar la sensibilidad dental. A continuación, te presentamos algunos de los tratamientos más efectivos:
- Pasta dental para dientes sensibles
Una de las primeras recomendaciones para tratar la sensibilidad es cambiar la pasta dental por una especialmente formulada para dientes sensibles. Este tipo de pastas suelen contener compuestos pensados para bloquear fisuras en la dentina con el objetivo de evitar el acceso de estímulos hacia el nervio de la pieza dental. Al usarlas de manera regular, muchos pacientes indican experimentar una reducción significativa de la sensibilidad.
- Cambiar el cepillo de dientes y suavizar la técnica de cepillado
Otro consejo bastante popular es optar por un cepillo de dientes con cerdas suaves, además de practicar una técnica de cepillado más delicada, para así disminuir la presión sobre las piezas y la encía.
- Uso de flúor para refuerzo
El fluoruro ayuda a remineralizar el esmalte de los dientes, lo que puede reducir considerablemente la sensibilidad. En algunos casos, los dentistas pueden aplicar geles o barnices de fluoruro para fortalecer el esmalte y prevenir su desgaste.
- Tratamiento para el bruxismo
Si la causa de la sensibilidad dental es el bruxismo, se puede recomendar el uso de una férula dental o protector nocturno para evitar el rechinamiento de los dientes durante la noche. Este dispositivo ayuda a proteger los dientes de la presión excesiva y previene el desgaste dental.
- Evitar productos ácidos
Reducir la ingesta de alimentos y bebidas ácidas, como jugos cítricos, refrescos o vinagre, puede ser clave para prevenir la erosión del esmalte y la sensibilidad dental. Si consumes estos alimentos, es recomendable esperar al menos 30 minutos antes de cepillar los dientes, ya que el esmalte puede estar vulnerable después de la exposición al ácido.
- Tratamientos dentales profesionales
Si la sensibilidad es severa o persistente, probablemente se deban considerar los tratamientos profesionales. En su mayoría, los dentistas pueden aplicar barnices o selladores especiales para proteger la dentina expuesta y reducir la incomodidad. No obstante, en casos más graves donde existan caries o problemas estructurales, puede llegar a ser necesario incluso realizar empastes o tratamientos de conductos radiculares.
La sensibilidad dental puede ser una afección molesta, pero con la combinación adecuada de cuidados preventivos y tratamientos profesionales, es posible manejarla de manera efectiva. Si experimentas dolor dental recurrente o persistente, te invitamos a reservar tu cita en el Consultorio Odontológico Dr. Manuel Riesgo, para recibir atención profesional y especializada.
