La higiene dental infantil es de vital importancia, para garantizar el correcto desarrollo de los niños. Desde el momento en que aparecen los primeros dientes, resulta fundamental establecer hábitos de cuidado bucal que sean eficientes y permanentes. En esta guía, exploraremos cómo cuidar los dientes de los más pequeños, qué medidas tomar según su edad y qué errores evitar, con el objetivo de proteger su sonrisa y promover una salud oral integral desde el inicio de su vida.
¿Qué es la higiene dental infantil?
La higiene dental infantil es el conjunto de prácticas y cuidados pensados para garantizar la salud bucal de los niños, lo cual suele ser practicado desde incluso antes de la aparición de los primeros dientes.
Dentro de este contexto, el cuidado bucal infantil suele contemplar tareas como el cepillado diario de los dientes, el correcto uso del hilo dental, visitas programadas al dentista y otras medidas establecidas con el objetivo de prevenir afecciones bucales.
¿Desde qué edad es necesaria la higiene dental infantil?
El cuidado de los dientes, como es de esperarse, debe comenzar apenas aparezca la primera pieza de la dentadura, lo cual suele ocurrir a los 6 meses después del nacimiento del bebé.
A pesar de que el primer set de dientes es temporal, estos requieren de los mismos cuidados que las piezas permanentes, sobre todo considerando que serán la antesala de la dentadura definitiva.
Por otro lado, si el niño no consume exclusivamente leche materna, es recomendable limpiar su boca después de cada comida, para eliminar los restos de las encías y la lengua, ya que la acumulación de restos podría alterar el balance de microorganismos y causar caries.
¿Cuál es la importancia de la higiene dental infantil?
Aunque los dientes temporales de los niños son conocidos también como “dientes de leche” debido a que se caerán, su salud tiene un impacto directo en el bienestar general del organismo, así como también en el correcto funcionamiento de la mandíbula y las acciones derivadas de ella.
Asimismo, es necesario destacar que la higiene bucal no debe centrarse únicamente en los dientes, sino también en las encías, ya que cualquier lesión o anomalía en la dentadura puede afectar la mordida y, a largo plazo, generar dificultades para una correcta alimentación. En este escenario, los problemas dentales pueden desencadenar infecciones bucales y hasta interferir con el desarrollo del lenguaje.
Otro aspecto importante resalta en que una dentadura sana y libre de problemas contribuye positivamente a la autoestima del niño. Un desarrollo dental inadecuado, por otra parte, puede alterar el crecimiento de la mandíbula y generar consecuencias estéticas y funcionales a medida que el niño crece.
¿Qué necesito para una higiene dental infantil?
Antes de comenzar con la limpieza de los dientes en los niños, es crucial contar con las herramientas adecuadas para garantizar un proceso eficiente, seguro y cómodo.
Por ello, uno de los primeros pasos consiste en elegir un cepillo de dientes adecuado para el infante. Mayormente, se recomiendan modelos de cerdas suaves y de cabeza pequeña, de forma que resulte ergonómico al momento de limpiar la boca.
En cuanto a la pasta dental, las opciones que tengan alto contenido de flúor son las más eficientes para garantizar la limpieza, lo cual debe reforzarse con hilo dental y un buen enjuague bucal.
¿Cómo cepillar los dientes de los niños?
A continuación, encontrarás una serie de pasos que podrán ayudarte durante las sesiones de higiene dental infantil:
Con el cepillo dental:
- Coloca la cantidad adecuada de pasta dental en el cepillo con base en el número de dientes.
- Posiciona el cepillo de dientes en la boca del niño, formando un ángulo en relación con las encías.
- Desliza el cepillo desde la encía hasta el borde del diente, asegurándote de repasar todas las caras de la pieza.
- Finalizar esta sesión con el cepillado profuso de la lengua.
Con el hilo dental:
- Terminado el cepillado, corta suficiente hilo dental para que puedas sostenerlo y manipularlo con comodidad.
- Una vez asegurado entre tus dedos, inserta el hilo entre los dientes y muévelo con suavidad de arriba hacia abajo para limpiarlos.
- Repite el proceso con todas las piezas dentales hasta retirar cualquier resto de comida o suciedad.
Con el enjuague bucal:
- Vierte enjuague bucal en la tapa medidora del bote y procede a dárselo al niño bajo las indicaciones de que debe enjuagar su boca sin tragar el producto.
- Verifica que el proceso de enjuague bucal dure entre 30 segundos y un minuto.
- Asegúrate de que el niño escupa por completo el producto y no enjuagues su boca con agua.
¿Cuándo debería ser la primera visita al dentista?
Especialistas en odontología recomiendan que la primera visita del niño al dentista sea cuando aparezca su primer diente, lo cual debería ocurrir antes de que cumpla 1 año.
Esta visita, aunque pueda parecer temprana, sirve para evaluar la salud bucal desde el principio, para así atender preventivamente cualquier afección o problema que pudiese alterar el correcto desarrollo de la dentadura y la mandíbula.
Al mismo tiempo, cabe destacar que la primera visita al dentista también puede ser aprovechada por los padres, para obtener orientación y recomendaciones en cuanto a la higiene dental del niño.
Sumado a esto, resulta necesario señalar que el objetivo de esta primera visita no debería limitarse únicamente a la examinación de los dientes, sino también a ayudar a establecer un vínculo positivo entre el niño y el dentista con el objetivo de adoptar hábitos y relaciones sanas en lo que al cuidado dental se refiere.
Si deseas obtener información acerca del cuidado de dientes de los niños o reservar una cita con un especialista, te invitamos a ponerte en contacto con el Consultorio Odontológico Dr. Manuel Riesgo, donde encontrarás atención personalizada las 24/7.